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Hato Tejas, Bayamón, Puerto Rico ¡Oh María, sin pecado concebida, ruega por nosotros, pecadores, que recurrimos a tí!
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Actividades
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Te admiro, Medalla Milagrosa, porque eres un espejo que lleva en sí mismo la luz y la imagen. Te abrazo, Medalla Milagrosa, porque eres un escudo pequeño que embota los dardos de las tentaciones más grandes. Te alabo, Medalla Milagrosa, porque eres moneda del celo acuñada en la tierra con valor inestimable. Te amo, Medalla Milagrosa, porque eres el sello entregado por la Virgen como perpetuo recuerdo de sus favores abundantes. Te aplaudo, Medalla Milagrosa, porque eres la providencia de la Virgen manifestada en todos los detalles de tus símbolos. Te bendigo, Medalla Milagrosa, porque eres la estrella de paz en las oscuras noches de la tribulación. Te beso, Medalla Milagrosa, porque eres el regalo de María, fabricado por ella misma con sus manos. Te celebro, Medalla Milagrosa, porque eres el ultimo retrato de María hecho según el gusto de su propio modelo. Te custodio, Medalla Milagrosa, porque eres un monumento sin par del dulcísimo Corazón de María. Te venero, Medalla Milagrosa, porque eres un salterio abreviado donde las manos de María pulsan el arpa de luz de sus innumerables gracias. Te defiendo, Medalla Milagrosa, porque eres la joya de la Reina del cielo para adorno de sus hijos de la tierra. Te glorifico, Medalla Milagrosa, porque eres la gloria del cielo en miniatura. Te honro, Medalla Milagrosa, porque eres escudo contra las saetas del enemigo. (Desconocido)
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